Terceros con lunas: “Cuarto y mitad”

La solicitud habitual de contratación de un seguro el día de hoy, tiende a ser en venta de seguros a tanto el kilo. La publicidad machacona de la mayoría de compañías de seguros y de las entidades financieras parece que no tuviera límites. Nada más importa el seguro más barato, y su descredito acompaña a todos, también a los que defienden que el profesionalismo es un valor añadido. Ya no interesa ni la calidad de los melones, ni el sabor de las naranjas. Solo interesa el precio por kilo.

Este mísero concepto, esta imagen que cada compañía se está auto infringiéndose esta cerca de caer a lo ridículo, y con mucha frecuencia sobrepasa los límites. Se publican conceptos que se asimilan al de “se venden manzanas de árbol”, y lo que hasta ahora nadie ha ofrecido, “patatas con piel sin crianza en maceta”. Y por si fuera poco estas fueran oriundas del país (o del país que sean) o al menos eso se deriva de afirmaciones como:

• Asistencia en viaje desde Km. 0
• Libre elección del taller
• Reparación de lunas en talleres concertados sin necesidad de que acuda el perito

Y así un largo etcétera de garantías que son tan básicas y conocidas que casi resulta imposible el contratar una póliza sin pretender unas “ampliaciones”, pero claro, ni tanto el kilo es más barato y por mencionar algo más, ni las naranjas son mediterráneas y las primeras que son regadas en agua dulce.

Con este mensaje de que se vende a tanto el kilo, que se nos introduce en la casa desde que se enciende por primera vez la radio, al anuncio último de la televisión, al pasar por todo elenco de publicidad; ¿Qué resultado obtenemos? Pues es lógico que muchos de los clientes demanden los melones más baratos, y el que se acuerda de algo más… pues que sean mediterráneas (diciendo que no sean españolas) y de paso regadas con agua dulce.

Existen también clientes que le dan valor a la intervención que hace un profesional en su medida justa, cada vez son más perseguidos y vilipendiados debido a una publicidad que ataca de forma directa, pero son precisos este tipo de clientes a quien se deben, son los otorgadores de las cartas de la naturaleza de los mediadores de seguros, a quien gusta el venderles las mejores naranjas o los mejores melones y siempre a un precio mejor con el que se les garantiza el mejor servicio,  y por si fuera poco con frecuencia no es más caro. A este tipo de clientela, que premian con sus reconocimientos, se debe servir el zumo de naranja cada mañana.

La mejor opción para contratar un seguro de coche es utilizar un comparador de seguros, de esta forma el usuario puede comparar coberturas y precio y optar por la opción que más se ajuste a sus necesidades.

Nuestra recomendación es utilizar Seguros-Generales un comparador de seguros de coche con todas las garantías.